HISTORIA

Desde cada área y rol, es necesario recurrir a la historia y conocer los orígenes de la Cárcel Pública. Para ello debemos situarnos en la Córdoba de la Nueva Andalucía del 1585, año en que la Cárcel Funcionaba en el patio del Cabildo Histórico de  nuestra Ciudad.

Desde aquellos días, varios sucesos modelaron lo que hoy damos en llamar “Servicio Penitenciario de Córdoba”. La Constitución de 1853 además de dar los lineamientos básicos de la organización nacional también se interesó en el régimen carcelario cuando expresa… “ las cárceles de la Nación serán sanas y limpias, para seguridad y no para castigo de los reos detenidos en ellas, y toda medida que son pretexto de precaución conduzca a mortificarlos más allá de lo que aquella exija, hará responsable al Juez que lo autorice…”

Así es que desde aquel organismo policial de la Compañía de Vigilantes de la Cárcel Pública, la creación del la Dirección de Cárceles (1929) y luego la Inspección General de Cárceles (1958); sentaron las condiciones necesarias para la creación en 1970 del Servicio Penitenciario de Córdoba.

Los avances produjeron también, nuevos claustros, desde aquel viejo Cabildo, luego vendrían la Casa de la Moneda (Av. Vélez Sarsfield y Gral. Paz) y las creaciones de la Cárcel de Penitenciaría (1889), y  la Cárcel de Mujeres en Buen Pastor (1900), la de Río Cuarto en 1.909 y tantas otras en el interior hasta nuestros días con nuevas propuestas arquitectónicas combinadas con la tecnología de avanzada.

También, debemos destacar el valioso aporte realizado por el Dr. Profesor  Sebastián SOLER, creador en 1.938 del Código Procesal Penal de la Provincia y a la postre el Artífice del proyecto Código Procesal Penal de la Nación.

Juntamente a estos progresos también los lineamientos legales tuvieron su evolución desde los reglamentos de la Cárcel Pública, la Dirección General de Cárceles (1947) hasta el 6 de octubre del año 1970 que se crea el Servicio Penitenciario de la Provincia de Córdoba, señalando en pocos artículos los aspectos básicos en los que designaba objetivos, estructura y dependencias, bosquejando el modelo institucional.

No obstante los aspectos legales, fueron perfilándose como instrumentos legales acordes a la evolución del penitenciarismo, tomando en cuenta los tratados internacionales y leyes federales, que permitieron el desenvolvimiento y la posibilidad de implementar y elaborar los aspectos jurídicos básicos, desarrollándose así un camino de progresos.

Llegando así a nuestros días con el manifiesto principal de La Ley Provincial 8812, por la cual la Provincia de Córdoba,  adhiere a la Ley Nacional 24.660, de Ejecución de la Pena Privativa de Libertad,  que conjuntamente con la Ley 9.235 De Seguridad Pública, guían el accionar de nuestra institución y la concreción de todo dentro del marco legal necesario para el desempeño de la misión institucional.

Hoy las actividades de la  Institución Penitenciaria se encuentran definidas dentro de los marcos legales,  ajustándose a los principios de los Derechos Humanos y según los pactos Internacionales, suscriptos por nuestro país al respecto. Estas acciones dan lugar al resguardo de las personas y la convivencia social, en definitiva la administración de la Justicia, a través de la aplicación de la Pena, como un instrumento legal que posibilite el orden, y su mantenimiento, en el contexto social.   A esto se suma la aplicación efectiva del tratamiento penitenciario, referido a la terapéutica necesaria y oportuna de carácter asistencial en el que participan un conjunto de áreas (médicos, psicólogos, psiquiatras, criminólogos, docentes, asistentes sociales, etc.), todo ello en pos de lograr la reinserción social, que es el objetivo fundamental de la institución penitenciaria.

Toda la potencialidad, se encuentra definida en estos fundamentos legales que delimitan claramente la Identidad Institucional, quedando en los integrantes y responsables, atender y respetar los propósitos sociales asignados. En este anhelo la capacitación del personal es de vital importancia para adecuar e incorporar todas los avances en la materia y obtener un verdadero éxito del logro institucional.